Una Historia Real

Hace algún tiempo que mi marido y yo disponemos de acceso a Internet y desde el comienzo nos llamo la atención un apartado de las news, concretamente las alt.bin… erotica.bondage, en las que se exponían juegos sexuales basados en el uso de cuerdas, esposas etc..

Las imágenes desde el principio nos parecieron muy excitantes, sobre todo aquellas en las que la frontera entre el sado y el ‘bondage’ estaban claramente delimitadas.

Al principio nos mirábamos de reojo, pero sin atrevernos a dar ningún paso adelante en este sentido.

Pero los hombres …. ya se sabe, …………………..

Mi marido tiene una especial sensibilidad en sus pezones, así que una noche en la que me hallaba ocupada en su entretenimiento favorito, es decir, pasar mi lengua por ellos, me miro fijamente, con una mirada increíblemente lasciva, y me soltó de improviso …… «chica … me parece que voy a atarte a la cama y jugar un poquito contigo …».

Yo, que no me lo esperaba le solté un no rotundo alegando que no me gustaba en absoluto, pero el lejos de echarse atrás se paso un buen rato intentando convencerme.

Al final y «para que veas que no pasa nada» me dijo: Bueno pues entonces tu me atas a mi, ¿vale?

Acepté.

Rebuscando por los cajones encontramos unos cordones de algodón muy suaves y un pañuelo grande, de los que usamos las mujeres para adornarnos el cuello…

Le vende con el los ojos y el se tendió en el centro de la cama, totalmente desnudo salvo unos slips bastante pequeños y de un color verde que me encanta.

Estuve observándole unos instantes, su pene casi se salía del slip. Le pase la mano suavemente por todo el cuerpo, deteniéndome en su polla durante unos segundos.

Incapaz de permanecer ya en su envoltorio de tela comenzó a asomar sobre el slip.

Tome uno de los cordones y le ate la muñeca derecha a uno de los barrotes de la cama. Su cuerpo se estremeció ligeramente al sentir el roce de las cuerdas. Repetí la misma operación con su muñeca derecha y entonces el estremecimiento se prolongo unos instantes mas.

Atado, con los brazos en cruz, se veía indefenso y a mi total disposición.

Le desnude completamente y me pase unos minutos volviéndole a chupar los pezones, mientras que con mi mano le acariciaba el pene. ¡Que duro lo tenia ya!

Ahora te faltan las piernas, me dijo. Y yo sin que hiciera falta que me lo repitiese le ate por los tobillos a ambos lados de la cama.

Estaba maravilloso y a mi disposición. Comencé a darle pequeños mordiscos por todo el cuerpo, y cuando llegue a los pezones salto literalmente, gimiendo de placer.

Su polla decía, ¡ comedme! Y en eso me entretuve, jugando con mi boca, sintiéndola latir mientras la chupaba lentamente, procurando que no se me derramara, sintiendo como vibraba todo su cuerpo.

Yo me hallaba también tremendamente excitada y mi coño se estaba deshaciendo cuando me coloque encima de el con su enorme pene penetrándome …

Yo nunca me había corrido con su polla dentro, pero en esta ocasión y después de moverme un rato, sintiéndome tan bien clavada, le sentí derramar su semen intensamente caliente en mi interior.

Y tuve un orgasmo como jamas lo había tenido …..

Ahora el insiste en repetirlo pero estando yo atada ….

¿Creéis que lo consiguió ? … Os gustaría saber lo que paso. ???

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