Yo, mi prima y mi otra prima

Esta es la primera vez que le cuento a alguien sobre lo que me sucedio hace ya algunos años, y que me cambió para siempre. Espero les guste y les exite mucho leerla ,comencemos.
Esto me pasó cuando tenía 18 años, para ese entonces yo no tenía nada de experiencia sobre sexo, a escepción de lo aprendido en la pornografía y el hecho que me masturbaba casi diario, pero eso si, la mayoria de esos momentos onanicos, los dedicaba a Pati, mi prima.
Pati, un año mayor que yo, es una chica muy muy guapa y super sensual, es morena,chaparrita, con unas tetas no muy grandes pero bien formaditas, y un tracero sensacional, lo que se dice un culote bien sabroso.
Un día, fuí a la casa de mis tíos, (ya no recuerdo para qué) pero cuando llegué, solamente estaba mi primita, la ví con su mini chortcito bien pegadito y una blusita estotada que dejaba ver mucho,y en cuanto supe que estaba en la casa a solas con ella, comencé a fantasear incontrolablemente, lo cual se podía notar en la silueta de mi pene erecto en mis pantalones, obviamente, yo no quería que se diera cuenta, así que trataba de ocultarla mientra ella me empezaba a platicar sobre como le fue en su dia, como Pati estaba acomodando una ropa yo solo veía su tracero moverse y sus pechos rebotando mientras se movía de un lado a otro por la habitación, en cuanto terminó se sentó junto a mí, y comenzamos una platica muy amena, pero cada vez mas intima, hasta llegar al momento en el que me preguntó si yo era virgen, a lo cual le contesté con la verdad, entonces me preguntó si ella me parecía bonita y fue ahí cuando le dije todo lo que sentía por ella, que tenía muchas ganas de cogermela y le mostré mi erección bajo el pantalon, ella al verme puso una cara de pervertida sexual, se me hacerco y me dio un beso muy duro mientras acariciaba mi miembro.
Al poco rato se incó frente a mi, y abrió mi pantalon, comenzó a acariciar a mano limpia mi pene, lo lamió suavente y comenzó a mamarmela, me dió la mejor mamada que me han dado hasta hoy día, no aguantaba mas, se lo dijé y ella me dijo que los echara en su boca pero que después le siguieramos, lo cual yo hice y ella se tragó tomo mi semen.
Nos quitamos toda la ropa, y pude apresiar su hermoso tracero, y sus pezones negritos, durtos y bien paraditos,sacó un condón de su bolsa,me lo puso, se recargó sobre la mesa de la sala poniendo su pepita al aire esperando por mi pene, y yo no me hice nada del rogar y comencé a darle, primero despacio con un poco de inseguridad, pero despues con embestidas muy fuertes y metiendoleso todo. ella daba gemidos que se convirtieron en gritos al mismo ritmo que sonaban mis testiculos chocando con su cuerpo, afortunadamente logré hacerla llegar al orgasmo, con el cual dio un grito muy fuerte mientras apretaba sus ricas nalguitas, yo seguía con ganas, así que la volteé con las piernas abiertas viendo hacia mi, estaba apenas comenzando a darle cuando escuche un ruido en la puerta de afuera, inmediatamente saqué mi pene y comencé a vestirme, pero no sirvió de nada, había llegado Abi, mi otra prima, hermana 2 mayor de Pati y 3 que yo, ella es mas bajito que Pati, igual de culoncita y un poco mas blanquita pero con mucho mas tetas que su hermanita, en cuanto nos vio desnudos, simplemente bajo su bolsa que traía y dijo
-Eres una egoísta Pati, ya sabías que en cuanto cumpliera 18 iba a ser para mi.
Yo me quedé con cara de pendejo, pero la cambie cuando Abi se nos acercó quitandose la ropa con mucha prisa, se besó muy cachondamente con su hermana, volteó a verme y me dijo que era su turno quería que se metiera a ella, yo me acerqué y ella se me empinó de manera que le daba de lengüetasos a su hermana mientras yo le daba a ella, nunca pensé que haría eso, solo en alguna de mis fantasias que me imaginaba en el baño de mi casa.
Seguimos por un rato y cambiamos de posiciones, pero tuvimos que detenerlos porque Abi dijo que ya iban a llegar mis tíos.
Después de eso volví a ir 3 o 4 veces mas a jugar con mis primitas cachondas, pero conocí a una chica que fue mi novia por mucho tiempo y tuve que dejar en paz a mis primas, pero eso si, lo que pasaba en la casa de mis tios cuando ellos no estaban, me convirtió en el adicto al sexo que soy ahora.

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